El IVEC recuerda natalicio del maestro Teodoro Cano (1932-2019)

Katlen (saludo)

Hoy nos convoca el ineludible recuerdo de Don Teodoro Cano. Nos convoca la ciudad imprescindible del artista totonaca, papanteco y universal, cuya obra escultórica y pintura mural forman parte del paisaje de toda la región del Totocacapan y enaltecen este patrimonio, que es un tesoro vivo.

Cito las palabras del Maestro Cano cuando se refiere al argumento de su obra:

    El pintor, tal como me lo enseñaron mis maestros Rivera, Siqueiros y Orozco, no debe ser ajeno a los problemas sociales, estamos presentes en esos problemas y debemos ayudar con nuestras herramientas, que son los pinceles. Yo soy un pintor muralista, me nutrí en la escuela de la pintura mexicana contemporánea que me enseñaron mis grandes maestros.

Como veracruzana que soy, he recorrido desde niña el Totonacapan, siguiendo algunas raíces de mi familia. Siempre me ha sorprendido la riqueza del paisaje, el verdor exuberante de la región y su comunión con la obra que sembró Don Teodoro.

Tuve la oportunidad de conocer al maestro en el año 2009, con motivo de una gran exposición retrospectiva que se presentó en la Pinacoteca Diego Rivera. Aquella muestra integró su obra de caballete en gran formato, fotografías de su obra escultórica monumental y mural en relieve. La exposición resultó una fiesta con danzantes, guaguas, bocoles y toritos, escuchando los acordes de Nimbe. Para la ocasión, el artista estrenó una pieza en ferrocemento de un guagua con penacho, que ahora se encuentra en el Jardín de las Esculturas de Xalapa.

A partir de entonces compartimos más que el trabajo. Agradezco la hospitalidad y el cariño de su familia, de sus hijos y de su esposa, Doña Yolanda Asaaleih de Cano, a quienes expreso mi afecto. Por encima de su talento y de sus virtudes, era un hombre de bien, un hombre generoso, con una sonrisa que expresaba más que sus palabras.

En vida realizamos aquella exposición, a través de la cual rendimos homenaje a su obra. En vida, él dirigió el proyecto del museo que hoy lleva su nombre. En vida, le expresamos nuestra admiración y respeto.

Nos entristece su ausencia. Sólo hace falta dirigir nuestra mirada hacia Papantla y la región para saber, con certeza, que él no se ha ido. Que a través de su obra ha trascendido y se quedará para siempre entre nosotros.

Es labor del Instituto Veracruzano de la Cultura difundir el legado del maestro Teodoro Cano. El museo fue diseñado por su hijo, el Arquitecto Miguel Cano y se inauguró en 2007, con la finalidad de abrir un espacio para la cultura en la ciudad de Papantla.

Hoy resguarda una colección de pintura de caballete que la famila Cano Assaleih ha concedido en comodato al IVEC para el disfrutre de los visitantes. Les invitamos a conocer este espacio, que mantiene viva la cultura totonaca que inspiró a nuestro insigne artista.

El maestro Teodoro Cano emprendió su viaje, como volador en la cumbre. Nos deja su espíritu generoso, su amplia sonrisa y su legado artístico que perdura y trasciende. Vamos a celebrar su vida y su obra.

[…] Maestro Teodoro Cano, 

en todas las latitudes

manifestó sus virtudes

artísticamente humano.

Aunque trascendió a otro plano

queda su obra gigantesca,

porque mientras permanezca

con el valor de su gente,

como pintura reciente

tendrán su memoria fresca.

                                                Mauro Domínguez                                                                                                                                              Décima al Maestro Teodoro Cano García (fragmento)

Pashkat katsini (muchas gracias).

Silvia Alejandre Prado